KARMA – YOGA




Yoga de la acción. Este yoga es básicamente una actitud ante la vida que se caracteriza por el espíritu de servicio, la entrega y el desapego. 

Es una senda donde se aprovechan y utilizan todas las acciones cotidianas como una vía o vehículo para realizar el estado de unión (Yoga). 

Resulta muy adecuado para aquellas personas que tienen mucha vitalidad y necesitan continuamente actuar y expresarse. La vida cotidiana es actividad que puede realizarse con muy distintas actitudes. 

Para el karma - yogui, la clave consiste en responder a las demandas de la vida con un tipo de acción consciente, armónica y despojada del sentido del ego.

Estos son algunos de los rasgos que definen al Karma – Yoga:

a) El Karma-yoga es intensificar la atención en el momento presente y elevar el nivel de consciencia a través de la acción. Es una forma de meditación dinámica en la que el adepto se implica totalmente en la acción mientras que interiormente permanece desidentificado.

b) En el Karma-yoga se realiza el trabajo cotidiano (cualquiera que sea) con el máximo de consciencia y entrega, manteniendo al mismo tiempo una actitud interior de desapego respecto a los resultados. De esta manera el trabajo deja de ser una carga para convertirse en una especie de juego que se disfruta plenamente.

c) Karma-yoga es realizar algún trabajo o servicio “desinteresadamente”. Así el aspecto negativo del ego queda inactivo. Cuando el ego es desactivado, automáticamente se manifiesta un nivel de consciencia superior.

d) En el Karma-yoga se deja de ser el protagonista de la acción para pasara ser un instrumento, a través del cual la acción sucede.

e) Mediante el Karma-yoga se llega a una confrontación con los propios conflictos y condicionamientos, los cuales se manifiestan de forma que pueden ser reconocidos y posteriormente resueltos.

f) La actitud primordial del Karma – Yogui es el espíritu de servicio, la entrega y el desapego. Dichas cualidades van instalándose paulatinamente en el practicante hasta que llegan a ser algo natural y espontáneo.

g) Cuando se vive plenamente el Karma-yoga desaparece el sentimiento de individualidad y el ego es trascendido por completo.

El Karma – Yoga no va separado de las otras vertientes yóguicas. Es el mejor complemento para los adeptos que practican la meditación, pues crea el equilibrio adecuado entre la experiencia interna y la vida en el mundo exterior. 

Cuando se practican otras formas de yoga, la actitud de servicio y desapego también florecen como consecuencia del proceso de crecimiento y maduración.

El “BHAGAVAD GITA” es el libro que plasma perfectamente la esencia del Karma – Yoga
Mahatma Gandhi ha sido uno de sus exponentes más importantes en la India contemporánea.